jueves, 22 de septiembre de 2011

GRANDES ESTUDIOS DE EE.UU

INTRODUCCIÓN
En la historia del cine se conoce como sistema de estudios al modelo estructural de la industria cinematográfica basado en tres conceptos: estudios, géneros y estrellas.
Aunque esta política de comercialización se aplicó en casi todos los estudios, incluidos los europeos (inicialmente los franceses, como Gaumont o Pathé), fue en Hollywood donde se desarrolló en su máxima expresión.
Bajo este sistema la industria del cine llegó a su apogeo, período también conocido como La Edad de Oro (o Era Dorada) de Hollywood.
El sistema de estudios apareció como consecuencia de la concepción del cine como un negocio en todos sus ámbitos (tanto en la producción como en la distribución). La tendencia monopolista propia del gran capitalismo de la Segunda Revolución Industrial, la misma que produjo la cadena de montaje en el automóvil (el otro gran símbolo de la nueva sociedad de consumo de masas), llevó a las productoras a entender el cine como un gran negocio del que poder sacar abundantes beneficios económicos. Posiblemente la primera en concebir el negocio cinematográfico de esta manera fue la productora Edison. Los años 30 y 40 fueron la época dorada de los estudios de Hollywood, aunque el sistema se forjó varias décadas antes en la época del cine mudo, cuando el cine de Estados Unidos consiguió la hegemonía mundial.
(google, 2009)
El cine se desarrolló desde el punto de vista científico antes de que sus posibilidades artísticas o comerciales fueran conocidas y exploradas. Uno de los primeros avances científicos que llevó directamente al desarrollo del cine fueron las observaciones de Peter Mark Roget, secretario de la Real Sociedad de Londres, que en 1824 publicó un importante trabajo científico con el título de Persistencia de la visión en lo que afecta a los objetos en movimiento, en el que establecía que el ojo humano retiene las imágenes durante una fracción de segundo después de que el sujeto deja de tenerlas delante. Este descubrimiento estimuló a varios científicos a investigar para demostrar el principio.
En EE. UU., las primeras exhibiciones de películas para grandes audiencias se hacían usualmente en los descansos de los shows de vodevil. Los empresarios comenzaron a viajar para exhibir sus películas, llevando al mundo las primeras incursiones en el género del drama. El primer gran éxito del cine estadounidense, así como el logro experimental más largo hasta el momento, fue El gran atraco al tren, dirigida por Edwin S. Porter. En los albores de la industria cinematográfica estadounidense, Nueva York fue el epicentro de los cineastas. El estudio de grabación de Kaufman-Astoria en Queens, construido durante la etapa muda del cine, fue usado por los hermanos Marx y W. C. Fields. Chelsea (Manhattan) también era utilizado con frecuencia. Mary Pickford, una actriz ganadora del premio de la Academia, rodó algunas de sus primeras películas en esta zona. Sin embargo, el mejor clima de Hollywood durante todo el año lo convirtió en una mejor opción para rodar.

GRANDES ESTUDIOS DE EE.UU

Desde comienzos de los años diez se fueron fundando las más importantes empresas de cine estadounidenses como la Universal Pictures, Fox Film Corporation —después conocida por 20th Century Fox-, United Artists, Warner Bros., Metro-Goldwyn-Mayer (MGM), Columbia, Paramount, RKO, que irían sufriendo diversas modificaciones en su estructura de gestión al fusionarse con otras empresas dedicadas a la exhibición y la distribución.
Como ya se menciono en el párrafo anterior,  cuando comenzaron los años diez, se fueron fundando empresas de cine estadounidense, mismas que con el paso del tiempo llegaron a sufrir grandes cambios al unirse con otras empresas más que también estaban dedicadas a la presentación y comercialización de películas.
El fortalecimiento de estas empresas hizo que la década de los años treinta fuera llamada como la “Edad de oro”, pues fue en esta época cuando se fueron creando los grandes estudios cinematográficos de Estados Unidos y también de todo el mundo.
Fue llamada así, la edad de oro, por que en cada uno de los años de esa década se realizaron muchas producciones con una variedad de temas y que ayudaron a definir una política de géneros en el cine.
(google, 2007)
Cada una de estas empresas que se fundaron tuvieron diversos temas o logos para representarse, como el caso de la ya conocida Metro Goldwyn que todos hemos observado alguna vez en una que otra película, donde se realiza su presentación con un famoso león y la otra, la llamada Paramount y la Warner, que fueron las que tenían estudios con mayores recursos. Y ya posteriormente se  unió a estas, la empresa 20th Century Fox, y esto provoco que a lo largo de los años, hubiese intercambio de actores y de directores según los intereses de cada uno.

La MGM se hizo con el estrellato cinematográfico gracias a los temas románticos dirigidos por Clarence Brown e interpretados por Greta Garbo (Ana Karenina, 1935), las más diversas historias firmadas por Víctor Fleming (La indómita, 1935; Capitanes intrépidos, 1937), en especial dos películas que marcaron una época de esplendor: Lo que el viento se llevó (1939), con Clark Gable y Vivien Leigh, y El mago de Oz (1939), con una jovencísima Judy Garland. Los hermanos Marx fueron dirigidos por Sam Wood en sorprendentes películas como Una noche en la ópera (1935) y Un día en las carreras (1937). La producción musical del Estudio quiso ser una proyección de los espectáculos de Broadway, tanto operetas (con Jeannette McDonald) como historias con mucho baile (con Eleanor Powell).

Cada una de estas empresas se supo desarrollar hábilmente en distintos tipos de géneros, como acabamos de mencionar en el caso de la empresa MGM o como la de la Warner Bros que creo géneros como el del cine negro y el del cine de aventuras, además también hubo cine dirigido al campo musical y las coreografías.
En el caso del cine negro Mervin LeRoy dirigió títulos tan representativos como Hampa dorada, (1930), con Edward G. Robinson, y Soy un fugitivo (1932), con Paul Muni; y en el cine de aventuras destacan las aportaciones de Michael Curtiz, representativas de un modo de hacer que atrapó al público de la época: La carga de la brigada ligera (1936) y Robín de los bosques (1938), ambas con Errol Flynn y Olivia de Havilland. Y en el campo musical sobresalieron las películas barrocas dirigidas y coreografiadas por Busby Berkeley.
Paramout por su parte apoyó los grandes filmes históricos de Cecil B. De Mille como El signo de la cruz (1932) y Cleopatra (1934), la comedia sofisticada y de fina ironía de Ernst Lubitsch (Un ladrón en mi alcoba, 1932; La viuda alegre, 1934) o el cine de gangsters y de terror dirigidos con buen pulso por Rouben Mamoulian (Las calles de la ciudad, 1931; El hombre y el moustruo. Dr. Jekyll y Mr. Hyde, 1932). Sus películas musicales fueron más bien historias en las que diversos actores cantaban unas canciones (Mae West, Bing Crosby, etc.).

(google, 2001)
La empresa Universal en su caso, se trato de especializar en las películas de terror, películas que tal vez ya hemos visto o que por lo menos ya habremos escuchado algo acerca de ellas, como la de Frankenstein y el Hombre invisible, o la de Drácula o tal vez la de La parada de los monstruos.
Y por otra parte se encontraba la empresa RKO que fue la que realizo los musicales, también junto con ella se encontraba la empresa llamada Culumbia.
Todas estas empresas pertenecían a un género distinto y cada una por su lado creó películas que fueron dejando huella a lo largo del tiempo.
Fue en Hollywood donde se concentraron la mayoría de los estudios más importantes del cine estadounidense, pues se beneficiaban por el buen clima que se vivía ahí y por la gran concentración de empresas existentes en dicho lugar.
Los estudios cinematográficos han sido muy criticados por el hecho de limitarse de los géneros cinematográficos y el aprovechamiento de los recursos. Pero no todo es tan malo, pues fue el sistema de estudios el que consolido las técnicas, el que sistematizo el modo de representación institucional y el que también profesionalizo el cine.





CONCLUSIONES

Para concluir con mi ensayo, cabe mencionar que el cine ha tenido muchos grandes cambios y que para poder desarrollarse como lo ha hecho hasta ahora, ha sido necesario contar con numerosos estudios donde realizar y presentar sus grabaciones.
Como siempre son los grandes personajes los que hacen que el cine valla cambiando y sus grandes creaciones son las que marcan la historia del cine.
Con la invención del cine muchos hemos descubierto una forma muy distinta de ver las realidades del mundo y claro que pues con el tiempo las cosas van cambiando, como es el caso del cine y sus transformaciones o cambios durante los años treinta, en que fueron creados muchos estudios cinematográficos que trajeron consigo grandes avances en todo esto referente al cine, se crearon grandes empresas y por lo tanto también se generaron empleos para numerosos actores y directores de cine.
sea en estados unidos, o sea  en cualquier otra parte del mundo, ha sido un siglo que queda marcado en la historia del cine, puesto que en los grandes estudios creados durante los años treinta y durante toda la época existente del cine  se han mejorado y se han creado muchas y muy buenas películas, con la calidad que jamás anteriormente se había imaginado siquiera.
Con los grandes estudios existentes en estados unidos, todo ha mejorado en cuanto a cine se trata, así es que con el paso del tiempo y con el desarrollo de nuevos y mejores estudios cinematográficos, probablemente en un futuro  no muy lejano tendremos películas de mejor calidad, realizadas con nueva y también mejor tecnología que la existente actualmente.











BIBLIOGRAFÍA

google. (6 de enero de 2001). Recuperado el 6 de septiembre de 2011, de http://www.duiops.net/cine/sistema-de-estudios.html

google. (11 de octubre de 2007). Recuperado el 6 de septiembre de 2011, de http://recursos.cnice.mec.es/media/cine/bloque1/pag.7.html

google. (23 de febrero de 2009). Recuperado el 06 de septiembre de 2011, de http://es.wikipedia.org/wiki/Sistema_de_estudios












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